Calentando la banca


¿Qué se siente cuando tienes que esperar en la banca del sexo o del fútbol hasta que te toque tu turno para jugar?
¿Se han preguntado aquello?
En mi caso, no solo que me lo he preguntado, lo he vivido. Tuve la experiencia, (no se si buena o mala, pero experiencia al fin), de involucrarme sentimentalmente con alguien que tenía su jugador titular. Básicamente yo quería entrar a la cancha, pero mientras están los jugadores completos, es un poco complicado. Y esperaba, esperaba, esperaba mi turno, calentaba el puesto, esperaba sentado en el sillón de los suplentes, demostraba que podía entrar a la cancha cuando fuera requerido, hasta que zas!!! Por A o B motivos, el titular se 'lesionó'.
Y ahí fue todo... Una vez adentro te sacas la madre, te la juegas todas y haces todo para no perder ese puesto... Hasta que de repente te llega una nueva oferta de fuera... Y toca decidir...
¿O me quedo jugando aquí, con ella, luego de tanto esperar la oportunidad y de tenerla al fin?, ó me decido por el otro chance que me llegó?. Chuta que difícil situación. Si solo se pudiera jugar en ambos lados, o de plano, armar un trio.... ¿Qué decidirías tu?

2 comentarios:

Eljacso dijo...

Ni me digas... ser suplente es lo peor... en cualquiera de las dos canchas. Comerte mierda porque sabrías que lo puedes hacer mejor... que las oportunidades de gol no las desaprovecharías y que tendrías mejor relación con el compañero de equipo...

En fin, me pasó... y no hay nada como la titularidad... pero como en todo... es algo que se gana...

Serenidad y paciencia...

El Sebas dijo...

Como dice el jacso no hay nada como jugar por eso creo que el momento de las desiciones hay que tener claro la oportunidad de tomar la titularidad o si es algo momentaneo hasta que vuelva el titular, mientras que en el nuevo club por lo general te llevan como refuerzo, te necesitan desde e principio. Yo creo que me iria al nuevo club, sobre todo si en el tiempo que se come banca uno ha sufrido.